"PATÍAS" GRAVES

octubre 07, 2021

El nombre de una enfermedad o simple dolencia a menudo tiene la terminación griega de "patía", tal sería el caso de cardiopatía, encefalopatía, endocrinopatía, gastropatía, neuropatía. Cuando esas palabras suenan de cerca se encienden alarmas para determinar el grado del daño y buscar tratamientos oportunos, porque la sola mención sugiere un estado ya avanzado del mal. Lamentablemente esa costumbre no aplica para trastornos de origen social, como en el caso del voto venezolano que lleva tiempo agonizando de "votopatia" declarada, pero su últimos respiros se pierden en culpas y justificaciones inútiles que impiden la recuperación de su salud.

Venezuela ha naufragado a mediodia y rodeada de sus habitantes, en el remolino de una dictadura mayor de 21 años, consentida con prominente afán de descrédito de las libertades del ser humano. En consecuencia, la tirania flota con facilidad mediante fraudes en votaciones con circuitos territoriales cambiados de manera ilegal, a la vez que adelanta y atrasa fechas de elecciones para mayores ventajas; modificación anticonstitucional de períodos de mandatos; nombramientos de funcionarios paralelos donde no logran imponerse a la fuerza; inhabilitación de dirigentes y agrupaciones; escrutinios prolongados hasta la media noche para llenar vacíos del registro por gente muerta, demás ausencias, o identidades multiplicadas; reparto previo de comida y dinero con lo que aseguran la sumisión de los débiles; y cadenas frecuentes de medios de comunicación para la propaganda gubernamental, a la que no tiene igualdad de trato ningún contrincante.

La mayor protesta a tantas arbitrariedades ha estado a cargo de corajudos estudiantes y jóvenes en episodios de calles donde ya pasa del centenar el número de muertes ocurridas; de algunos militares disidentes encarcelados y torturados hasta hacerlos fallecer, otros por ajusticiamiento; y periodistas y civiles que reciben condenas judiciales por pensar distinto básicamente. El grueso de los llamados políticos ha preferido cuidar su pellejo con la ilusión pero opción improbable de ganar algun cargo en las múltiples elecciones con las que los entretienen hasta ahora, sin resistencia efectiva para hacer mella al largo yugo que sufre la población. La indiferencia produce repugnancia tal se manifiesta ahora en la historia del joven David Vallenilla, asesinado a quemarropa en 2017 por el sargento Arli Cleiwi Méndez Terán, siendo motivo de clamor de justicia y de diligencias al respecto por sus padres principalmente, debido a la rápida liberación reciente del asesino.

La respiración artificial por parte de la delegación de la Unión Europea como medio de resurrección del voto quizá servirá de auxilio a la dirigencia para que vuelva a ganar la confianza y credibilidad perdidas. Así, en la alcancía varios folletos sobre importancia de la autocrítica en busca de raíces de sufrimiento en cuerpos enfermos; y de tratamientos que hagan retroceder la grave "votopatía" actual, so pena del relevo a fondo de líderes fracasados con evidente sangre de horchata. En la vitrola se oye a Gloria Martín, en melódica denuncia con plenas libertades de sus cuerdas vocales, y escasas posibilidades de persecución, atropello y heridas mortales, bajo secuestro posterior de la actual tiranía del siglo XXI.

https://youtu.be/DCxVSKFmMYs